viernes, 23 de abril de 2010

CASOS DEL CORAZÓN

Mi esposo no me hace feliz

 REBECA (33, San Miguel).- Llevo tres años de casada y debo confesar hasta con un poco de vergüenza que no soy feliz en la intimidad, pues mi esposo no logra darme la satisfacción que esperaba. Antes de casarnos no tuvimos relaciones sexuales porque José Luis me decía que deseaba tener una verdadera luna de miel y guardar esos deseos para nuestra primera noche juntos. A mi esa idea me pareció fantástica, pues lo tomaba hasta como un juego, como si fuéramos un par de jovencitos inexpertos que tendríamos nuestro primer encuentro íntimo y reconozco que esa incertidumbre me resultaba excitante. Sin embargo, doctora, la luna de miel me resultó frustrante porque no colmó mis expectativas, pero lo atribuí a que José Luis estaba pasado de tragos. Después he ido disculpando la falta de satisfacción que siento porque lo amo, pero ya son tres años y la situación no ha cambiado, pues mi marido siempre hace lo mismo, no varía, no me dice para hacer juegos sexuales y no logra que yo llegue al  clímax, pues él llega al orgasmo muy rápido. Esta situación está generando que me ponga de mal humor y a veces pierda la paciencia con mi esposo, quien se extraña de mi mal carácter. Sinceramente no sé qué hacer, pues también me da vergüenza tocar el tema con él, ya que no sé cómo decirle que no me satisface sin que se vaya a ofender. Yo amo a José Luis, doctora, pero no sé cómo hacer para tener un matrimonio feliz, pues me siento insatisfecha sexualmente, a pesar de que él es muy cariñoso y hacemos el amor seguido, pero nunca colma mis expectativas. Yo no quiero divorciarme ni perder mi matrimonio porque hay mucho amor de por medio, pero como usted comprenderá, el sexo también es importante.No quisiera que la relación termine de estropearse o que acabe cayendo a otras tentaciones y por buscar placer engañe a mi esposo.

CONSEJO: Cuando estén en intimidad plantéale los juegos que quieres, llévalo a hacer cosas diferentes para que poco a poco encuentren nuevas maneras de satisfacción. Si las cosas no cambian, quizá necesiten ir juntos a una terapia o a un médico, pues tal vez tenga un problema de eyaculación precoz.