domingo, 27 de junio de 2010

CASOS DEL CORAZON

Mi enamorado se parece a Shrek
Juliana (26, Rímac) Doctora, necesito su consejo. Sucede que he descubierto que estoy emparejada con el Shrek Peruano, pues mi enamorado es tan feito como el famoso ogro verde y hasta tiene un cierto parecido físico con dicho personaje que se ha convertido en el punto de las burlas de mis amigos y compañeros de trabajo, cosa que ya no soporto y estoy pensando en dejarlo.
Si bien al principio no me molestó que Lorenzo no fuera un hombre guapo, pues eso lo recompensaba su hermoso corazón, razón por la cual acepté ser su enamorada hace cinco meses, estoy empezando a cambiar de opinión y todo por el anunciado estreno de la película de Shrek que está siendo promocionada en todos los medios de comunicación.
Sucede que mis amigos del barrio, tras ver que mi pareja se parece al famoso ogro verde, han empezado a fastidiarlo cada vez que va a mi casa a visitarme o cuando nos ven en alguna reunión juntos. Los muy graciosos le gritan “ahí viene el ogro, escóndanse que nos va a comer“. Inclusive, una vez me llamaron “Fiona”, como la pareja de Shrek, lo cual me puso furiosa.
Pero ahí no acaba mi problema, doctora, pues sucede que mis compañeros de trabajo también se han contagiado de la fiebre de Shrek y cuando ven a Lorenzo esperándome en la puerta o al frente de mi trabajo, empiezan las burlas y los chistes sobre su aspecto físico. Ello provocó que hace días mantuviera una fuerte discusión con dos compañeras de trabajo y he tenido que inventarle una excusa a mi enamorado para que ya no me recoja más.
Sé que esto podría resultarle comiquísimo a muchos, pero yo siento vergüenza cuando salgo de la mano con Lorenzo a caminar por la calle o a jironear en el centro de Lima, pues siento que todos se burlan de nosotros y para mi sorpresa doctorcita, a quien no parece molestar en lo absoluto todo esto es a mi enamorado, quien se ríe con la comparación y los chistes ¿Qué hago?

CONSEJO:
Me parece que estás haciendo una tormenta en un vaso de agua. Haz como tu enamorado, ríete de todo esto. Además, recuerda que lo más importante es la belleza interior y no la externa. No dejes a un buen hombre por una tontería. Suerte.

martes, 22 de junio de 2010

CASOS DEL CORAZON

Mi novio baila como Martínez

Julie (20,Santa Anita) Vivo una gran encrucijada doctora, pues estoy a punto de terminar con mi enamorado y todo porque baila igualito de horrible que el ex de Gisela Valcarcel, Roberto Martinez, lo cual me ha convertido en el hazmerreir de mis amigas y familiares. El problema empezó hace dos semanas cuando Raúl, a quien conocí en mi instituto y con quien estoy de enamorada hace mes y medio,y yo asistimos al cumpleaños de una amiga en común. Era la primera fiesta a la que íbamos juntos, pues antes y después de declararme su amor sólo me llevó al cine y a comer.

Al pasar las horas le dije a Raúl para bailar, pues si de algo debo enorgullecerme doctora es de lo bien que me muevo en la pista, sobre todo en las discotecas donde mis amigas me hacen barra para romper a mis parejas.

Tras rogarle unos minutos, Raúl terminó por acceder y me sacó a bailar un merengue, terrible error, porque ni bien nos acomodamos comenzó a mover su brazos y sus pies fuera de ritmo e hizo los pasos de Roberto Martinez en "El Gran Show".

Pero mi verdadera pesadilla se inició cuando escuché que los otros invitados a la fiesta, incluyendo a mis mejores amigas y algunos de mis familiares, empezaron a burlarse de él y le decían "tú le ganas a Martinez, jajajaja". Pensé que se enojaría con ellos; sin embargo, siguió bailando con más ahínco.

Ruborizada lo jalé del brazo y lo saqué en medio de las carcajadas de todos. Quería llorar de impotencia porque nunca había pasado semejante vergüenza.

Raúl, al verme molesta, me preguntó qué pasaba y le dije que todos se habían burlado de nosotros al vernos bailar. Me abrazó y me dijo que exageraba. Tras escucharlo, le pedí que me dejara en mi casa. Desde esa noche soy la burla de todos mis conocidos, quienes imitan a Raúl cuando nos ven juntos. No sé qué hacer. A veces creo que debería alejarme de él, pero lo quiero.

CONSEJO: Si de verdad amas a tu pareja deberías dejar de lado el orgullo y continuar con tu relación, pues no sería justo terminar con él sólo porque no baila bien. Ahora, si tanto dices que eres una gran bailarina, ¿por qué no le enseñas algunos pasos? Así tal vez mejora en la pista. Suerte.

CARICATURAS PERSONALIZADAS

CARICATURA DE KIYOSHI KOHATSU - JAPON

miércoles, 16 de junio de 2010

CASOS DEL CORAZON

Quiero recuperar mi hogar

NICOLÁS (44, Villa El Salvador).- Hace un par de años dejé mi casa por irme detrás de una mujer que me volvió loco, me hizo olvidar de todo y de todos, incluyendo a mis hijos y las responsabilidades que tenía con ellos y mi esposa.

Después de conocer a Leandra no tuve ojos ni cabeza para nadie más. Me envolvió como una gata y me llevaba al sétimo cielo cuando hacíamos el amor, al punto que en más de una ocasión me escapé del trabajo antes de la hora de salida para estar con ella.

Muchas veces dejé de ir a dormir a mi casa y hasta me ausenté dos días seguidos, como jamás antes lo había hecho, sólo por el placer de disfrutar con Leandra en la intimidad, gozar de sus caricias y de su cuerpo.

Me volví tan loco por ella que cuando me planteó dejar lo todo para irme a vivir con ella no lo pensé dos veces, le pedí la separación a mi esposa y formé un nuevo hogar.

No dejé de velar por mis hijos, pero no los veía muy seguido porque Leandra acaparaba todo mi tiempo. Sin embargo, mi felicidad no duró mucho tiempo, pues al principio teníamos una persona que nos ayudaba en los quehaceres de la casa, pero cuando mi presupuesto fue ajustándose más tuve que despedirla.

Creí entonces que Leandra se encargaría de algunas cosas y yo la ayudaría en otras, pero ella jamás lavó un plato y el departamento que ocupábamos era una desgracia. Después fue alejándose y finalmente un buen día me dejó para irse con otro.

Ahora me doy cuenta que dejé mi verdadero hogar por una ilusión pasajera y por alguien que no valía la pena. Quiero recuperar a mi esposa y mis hijos, pero no sé si podré lograrlo, pues mi esposa está reacia a tener un acercamiento.

CONSEJO: Creo que debes darle vuelta a la página de ese oscuro capítulo de tu vida, quedarte solo un tiempo y recuperar a tus hijos. En cuanto a tu esposa, creo que debes dejarla tranquila. No es justo para ella que la busques sólo porque la otra de te dejó.

OSVALDO CATTONE

TAXI 2OSVALDO CATTONE y su Gran Compañia en: TAXI 2

martes, 8 de junio de 2010

CASOS DEL CORAZON


Sólo habla de fútbol

MARCELA (39, Surco).- Todavía no empieza el mundial de fútbol y mi esposo todo el día habla de ese deporte. Paraliza todas sus actividades cuando juega su equipo favorito y si no puede ir al estadio me llena la casa de amigos a los que hay que atender, amén de soportar sus gritos cuando hay un gol.

Tengo tres años de casada y ya me sé los nombres de todos los equipos de fútbol y hasta de los jugadores, pues Mariano lo primero que hace al levantarse es escuchar las noticias deportivas, por las noches hace lo mismo y tiene el cuarto lleno de revistas del llamado deporte de las multitudes.

No sabe sintonizar otro canal que no sea el de deportes y yo me tengo que soplar sus programas por no irme a la sala solita a ver alguna película.

Antes de casados sabía que era fanático de ese deporte, pero nunca imaginé que fuera tan exagerado.

Pero ahora que está por empezar el Mundial de Sudáfrica, Marcelo ya se está preparando y ha pedido vacaciones especialmente en el mes que dura este campeonato para no perderse ni un partido.

Se ha comprado un televisor de pantalla más grande y para el día de la inauguración ha invitado a unos amigos. Ya sé que me espera desayunar fútbol almorzar y comer fútbol.

Sincermaente me parece demasiado exagerada su afición y cuando le digo que debe medirse y ver aunque sea una película conmigo, me dice que soy una aguafiestas y que no lo entiendo.

Y es que en realidad se ve también todos los partidos de Europa y se emociona como si el fuera hincha de uno de esos equipos, lo que me parece absurdo.

Le he pedido que por lo menos me preste un poco más de atención, pero creo que en el mes del mundial pasaré a ser un mueble más de la casa y se acordará de que existo sólo cuando tenga hambre.

CONSEJO: Definitivamente tienes que hablar con tu esposo, pues una cosa es ser hincha y otra un fanático sin control que deja todo por ver un partido de fútbol. Dile cómo te sientes para que se enmiende. No te dejes vencer. ¡Suerte!