sábado, 19 de diciembre de 2009

CASOS DEL CORAZON

Me engañaba
con
mi hermana

ELOISA (28, Ayacucho).- Todas las cosas malas me sucedieron en corto tiempo, doctora, al punto que a veces me pongo a pensar qué mal he hecho para que Dios me castigue de la manera en que lo está haciendo.

Después de varios años de matrimonio descubrí que mi esposo me engañaba, pues en más de una ocasión le encontré las boletas de un hotel y manchas de lápiz labial en las camisas.

Nunca le dije nada porque tiene un carácter muy fuerte y no quería peleas ni discusiones delante de mis hijos. Callé un buen tiempo hasta que un día, cuando me pidió tener intimidad, le increpé su actitud y ocurrió lo que me temía. Empezó a gritar, a decirme que estaba loca y que le inventaba amantes.

Di por terminada la pelea para que no se despertaran mi hijos y de ahí en adelante omití hablar del asunto. Lamentablemente nunca he trabajado, pues me casé con Leoncio al año de salir del colegio y siempre me dediqué a criar a mis hijos, por lo que soporto sus engaños, pues si lo boto no tendría cómo mantener a mis hijos.

Pero eso no es lo peor doctora. Lo más terrible fue enterarme de que la mujer con la que me engañaba era mi propia hermana a quien siempre le abrí las puertas de mi casa.

Mi hermana es mayor que yo, está soltera y siempre ha vivido la vida loca. No es la primera vez que se mete con un hombre casado y ha tenido problemas con las esposas que le hacen escándalos, pero jamás imaginé que podría meterse con mi esposo.

Como si fuera poco, a pesar de haber sido descubiertos, Leoncio sigue saliendo con mi hermana y nuestra relación está por los suelos, pues yo ya no tolero que me toque y ni siquiera puedo contarle a mis padres lo que ocurre, pues los pobres morirían de un infarto.

CONSEJO: Tienes que aprender a quererte más y perderle el miedo a tu esposo. No puedes tolerar que se burle de ti sólo porque no trabajas. Algo tienes que hacer, vender dulces, lo que sea, para rehacer tu vida al lado de tus niños.

No hay comentarios: