Estuvo tras las rejas
GUILLERMO (30, El Agustino).- Soy hijo único y mis padres siempre depositaron absoluta confianza en mi. Trabajaron duro para darme una buena educación y se generaron expectativas en torno a mi, esperando que sea un profesional, encuentre una mujer digna como mi madre y los llene de nietos.
Nunca busqué enamorada porque siempre he pensado que el amor llega solo. He tenido una que otra pareja, pero nada serio, hasta que conocí a Nelly, una mujer muy trabajadora con la que llevo seis meses de relación.
Sin embargo, parece que no estamos destinados a vivir juntos por siempre y formar un hogar, pues al poco tiempo de empezar a salir y antes de darme el sí cuando le pedí que fuera mi enamorada, me confesó que cometió un error y acabó presa en el penal de Chorrillos.
Por conseguir dinero para curar a su madre enferma que murió cuando estuvo detenida, intentó sacar droga del país y fue descubierta en el aeropuerto.
Ella ya pagó su condena y ha podido salir adelante. Trabaja en la caja del restaurante donde almuerzo mi menú diario y es precisamente donde la conocí.
La relación entre nosotros marcha bien, pero temo que cuando se la presente a mis padres y les cuente su pasado la rechazarán se opondrán a lo nuestro y yo no tendré el valor de contradecir a mis padres.
He pensado en no contarles nada, pero Nelly me dice que es preferible decirle todo, pues nadie sabe si más adelante alguien les cuente de su pasado.
Sinceramente no sé qué hacer, pues amo a Nelly, pero les debo tanto a mis padres que no quiero lastimarlos.
CONSEJO: Creo que debes tener el valor de defender tu amor. Habla con tus padres, dile de tus sentimientos y si ellos te aman sabrán entenderte. ¡Suerte!
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